Leads and Lags.

 La técnica denominada Leads and Lags consiste en el adelanto (atraso) del cobro (pago) de operaciones de comercio exterior en función de las perspectivas de revaluación (devaluación) de la divisa en que están denominadas dichas operaciones.

            Las restricciones a esta práctica en principio son dos:

  1. Debe negociarse con la otra parte, que en muchos casos no estar interesada en efectuarlo. Así, por ejemplo, una empresa francesa ha realizado una venta a un cliente iberoamericano denominada en dólares USA con pago aplazado. Si el dólar tiene perspectivas de apreciación frente al franco y a la moneda iberoamericana, a la empresa francesa le interesar aplazar el cobro en dólares (por existir beneficios potenciales de cambio), pero el cliente iberoamericano intentar lo contrario, acelerar el pago en dólares (por estar expuesto a pérdidas potenciales de cambio). En cambio, si el cliente fuera norteamericano le sería indiferente o incluso beneficioso el que su proveedor francés le aplazase su obligación de pago (por supuesto, sin ningún tipo de interés), ya que no está expuesto por dicha operación al riesgo de cambio.

            Esta restricción no tendrá efecto, en el caso de una empresa con filiales en el exterior con respecto a las transacciones interfiliales o matriz-filiales.

  1. La segunda restricción se deriva del posible control de los gobiernos implicados por parte de comprador y vendedor de las operaciones en divisas. Las empresas que deseen cubrirse con este mecanismo deben informarse sobre la situación y evolución del control de cambios en los países donde operan.

  

Factoring internacional y forfaiting.

            Una solución simple de eliminar el riesgo de cambio  asumido en un derecho de cobro en divisas es vender este derecho de cobro a una institución financiera mediante el factoring o el forfaiting.

            Una operación de factoring consiste simplemente en la cesión a un tercero ("factor") de los derechos de cobro sobre los clientes de la empresa a un precio establecido según contrato.

            El factor o empresa de factoring se encarga del cobro al cliente y asume el riesgo total de la operación. Esta fuente de financiación, ofrecida en un principio al comercio interior de un país, se desarrolla a nivel internacional a partir de los años 50. Con el factoring, la empresa elimina el riesgo de cambio de sus operaciones de exportación, obteniendo además otras ventajas como:

a)       La seguridad de cobro.

b)      Acceso a información sobre la solvencia de posibles compradores.

c)       Financiamiento de las exportaciones.

d)      En el caso de que la empresa ceda todos sus derechos de cobro a un factor se ahorra el coste de servicios administrativos como investigación de los clientes en el exterior, gestión de cobro, contabilidad y estadística de exportación, etc.

            El inconveniente principal del factoring es su coste, ya que debe permitir a la empresa de factoring asumir los riesgos implicados en su actividad y obtener un beneficio.

           

El forfaiting es una técnica similar al factoring, aunque presenta las siguientes características propias:

a)       Está orientado a operaciones a medio plazo (1 a 7 años).

b)      Se centra en la compra de obligaciones "sin recurso" de operaciones derivadas del comercio internacional.

c)       Es una operación utilizada exclusivamente por empresas exportadoras e importadoras (fundamentalmente del sector de bienes de equipo) y por empresas multinacionales.

 

            Su principal restricción es su elevado coste.